Hoy en día, contamos con una gran cantidad de productos diseñados para hacer nuestra vida más fácil y segura. Sin embargo, lamentablemente, esto no siempre se cumple.
En algunas ocasiones, estos productos pueden estar defectuosos y causar grandes daños y lesiones que afectan nuestra vida. Por lo tanto, es fundamental tomar las medidas necesarias para proteger tus derechos y obtener la compensación que te corresponde.
En este artículo, te explicaremos exactamente qué hacer si sufres un accidente debido a un producto defectuoso:
Buscar Atención Médica: Lo primero que debes hacer es buscar atención médica de inmediato. En estas situaciones, tu salud y bienestar son lo más importante. Incluso si tus lesiones no parecen ser muy graves, un profesional debe evaluarte, determinar que estés fuera de peligro y detallar qué cuidados o tratamientos requieres.
Mantener el Producto: El producto defectuoso, sin importar el estado en el que esté, es la prueba irrefutable de que algo salió mal con él. Y es la evidencia clave para presentar tu demanda. Si el producto es cambiado o alterado, puede perjudicar gravemente tu reclamo.
Documentar las Lesiones: Las fotografías, videos y reportes médicos son otra prueba clave para tu demanda. Esto demuestra qué tan graves fueron las heridas y cómo te afectan en tu vida diaria.
Conservar el Embalaje y Documentación: Toda la documentación que acompaña al producto cuando lo compras puede ser importante para demostrar el origen del mismo.
No Usar el Producto: Si el producto defectuoso sigue siendo posible de usar, no lo hagas. Una vez que haya fallado, puede volver a hacerlo y causarte aún más daños.
No Declarar frente a la Compañía: Aconsejamos no hacer declaraciones a la compañía o fabricante del producto sin la presencia de tu abogado para evitar cualquier malentendido y tratos que no te beneficiarán.
Consultar con un Abogado de Lesiones Personales: A la hora de presentar un reclamo por un producto defectuoso, un abogado de Lesiones Personales podrá ayudarte. Tiene experiencia en este tipo de casos y conoce cómo funciona la ley y qué derechos tienes para obtener una compensación justa.
En resumen, una vez que te asegures de que tu salud no corre riesgo, es hora de buscar justicia.